Consider the “God-wink” / Considerar el “Guiño de Dios”

I often have difficulty sleeping at night. I use this as an opportunity to ask God to speak to me. Insomnia can be a scary and unsettling occurrence. But what may appear to be a misstep is often exactly how God meant for it to be. We must go where God wants us to and listen to His nudges. A trusted friend has coined the term the “God-wink”, when things happen for one reason or another and we realize they are God’s intervention.

Right now, I can’t sleep particularly because I have nasal congestion. I often tend to get frustrated or disheartened. Yet I am so overdue for prayer and a conversation with God that this cold is a good thing. And since this post is also overdue, it works out, because in the silence that surrounds me, I can write and finally be aware of God’s presence. 

God, I need assistance to find patience and strength, to remember that you should be my number one priority, and that through this, everything else that needs to happen in my life will follow. Help me to find the words and to know your presence is right here with me when I am distracted by the busyness of daily life.

Today’s Gospel is a reminder of the importance of going to the Father, Son, and Holy Spirit together in prayer. It reminds us that Christ wants an active relationship with each one of us. Anything we need, we can find in life with Him. We just have to be able to listen to His voice. Sometimes, the silence of the night can be the best time to seize that opportunity. After all, it is in darkness that the presence of light is most appreciated.

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A menudo se me dificulta dormir por las noches. Utilizo esto como una oportunidad para pedirle a Dios que me hable. El insomnio puede ser un hecho aterrador e inquietante. Pero lo que puede parecer una equivocación es a menudo exactamente como Dios quiso que fuera. Debemos ir a donde Dios quiere que vayamos y escuchar sus empujones. Un amigo de confianza ha acuñado el término “guiño de Dios”, cuando las cosas suceden por una razón u otra y nos damos cuenta de que son intervención de Dios.

En este momento no puedo dormir porque tengo congestión nasal. A menudo tiendo a sentirme frustrada o desanimada. Sin embargo, estoy tan atrasada en orar y conversar con Dios que este resfriado es algo bueno. Y como esta reflexión también está atrasada, funciona, porque en el silencio que me rodea, puedo escribir y por fin ser consciente de la presencia de Dios.

Dios, necesito ayuda para encontrar paciencia y fortaleza, para recordar que tú debes ser mi prioridad número uno, y que a través de esto, todo lo demás que deba suceder en mi vida seguirá. Ayúdame a encontrar las palabras y a saber que tu presencia está aquí conmigo cuando estoy distraída por el ajetreo de la vida diaria.

El Evangelio de hoy es un recordatorio de la importancia de acudir juntos al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo en la oración. Nos recuerda que Cristo quiere una relación activa con cada uno de nosotros. Todo lo que necesitamos lo podemos encontrar en la vida con Él. Sólo tenemos que poder escuchar Su voz. A veces, el silencio de la noche puede ser el mejor momento para aprovechar esa oportunidad. Después de todo, es en la oscuridad donde más se aprecia la presencia de la luz.

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Dr. Alexis Dallara-Marsh is a board-certified neurologist who practices in Bergen County, NJ. She is a wife to her best friend, Akeem, and a mother of two little ones on Earth and two others in heaven above.

Feature Image Credit: Vanesa Guerrero, rpm, cathopic.com/photo/249-lantern