Chewing On Scripture / Masticando las Escrituras

This year I have been volunteering in my parish’s catechesis program. We are so blessed to have two atriums, or classrooms, that are dedicated to using the Catechesis of the Good Shepherd (CGS) model. The CGS model is rooted in a Montessori style approach to education and encourages hands-on opportunities to explore the truths of our faith. I am volunteering with the youngest children, ages 3-6. One of the key questions asked at this level is, “I wonder what….?” After reading this Gospel, I found myself asking this very question.

I wonder what Jesus was teaching that day which left everyone so astonished?

I wonder what Jesus’ voice sounded like?

I wonder what it would have been like to hear the voice of the man possessed by a demon? 

I wonder what the man looked like?

I wonder how the man changed after the demon left him?

I wonder how people expressed their amazement when describing what happened?

I wonder. This question doesn’t necessarily have a “right” or “correct” answer. When we ask the children in our atrium, “I wonder what Mary felt like when the angel told her about Jesus,” we get all sorts of answers. Some are more focused than others, but no answer is deemed unacceptable. The invitation to wonder is open to everyone and we collectively participate in the process.

By posing “I wonder” questions, we invite the children and ourselves to sit and ponder what was just heard. Perhaps you recall from science class that cows will chew their cud, continuing to chew up their feed to extract every ounce of nutrients from it. Even something that was already chewed once will return to the cow’s mouth to continue to be broken down and further digested. “I wonder” questions provide us the opportunity to “chew on Scripture” if you will. There is always something more we can hear, because God’s Word is alive and active each time we encounter it. I wonder what God will draw your attention to today.

Contact the author


Este año he sido voluntaria en el programa de catequesis de mi parroquia. Tenemos la gran suerte de tener dos atrios o aulas dedicadas a utilizar el modelo de Catequesis del Buen Pastor (CGS en inglés). El modelo CGS tiene sus raíces en un enfoque educativo estilo Montessori y fomenta oportunidades prácticas para explorar las verdades de nuestra fe. Soy voluntaria con los niños más pequeños que tienen entre 3 y 6 años. Una de las preguntas claves que se hacen en este nivel es: “Me pregunto ¿qué…?” Después de leer este Evangelio, me encontré haciendo esta misma pregunta.

Me pregunto ¿qué estaba enseñando Jesús ese día que dejó a todos tan asombrados?

Me pregunto ¿cómo sonó la voz de Jesús?

Me pregunto ¿cómo habría sido escuchar la voz del hombre poseído por un demonio?

Me pregunto ¿cómo era ese hombre?

Me pregunto ¿cómo cambió el hombre después de que el demonio lo dejó?

Me pregunto ¿cómo la gente expresó su asombro al describir lo que había pasado?

Me pregunto. Esta pregunta no tiene necesariamente una respuesta “correcta” o “correcta”. Cuando preguntamos a los niños en nuestro atrio: “Me pregunto ¿cómo se sintió María cuando el ángel le habló de Jesús?” obtenemos todo tipo de respuestas. Algunos están más centrados que otros, pero ninguna respuesta se considera inaceptable. La invitación a preguntarse está abierta a todos y participamos colectivamente en el proceso.

Al plantear preguntas tipo “Me pregunto”, invitamos a los niños y a nosotros mismos a sentarnos y reflexionar sobre lo que acabamos de escuchar. Quizás te acuerdes de la clase de ciencias que las vacas rumian y continúan masticando su alimento para extraerle cada gramo de nutrientes. Incluso algo que ya fue masticado una vez regresará a la boca de la vaca para continuar descomponiendo y digiriendo. Las preguntas tipo “Me pregunto” nos brindan la oportunidad de “masticar las Escrituras”, por así decirlo. Siempre hay algo más que podemos escuchar, porque la Palabra de Dios está viva y activa cada vez que la encontramos. Me pregunto qué Dios hará llamarte la atención hoy día.

Comunicarse con la autora

Kate Taliaferro is an Air Force wife and mother. She is blessed to be able to homeschool, bake bread and fold endless piles of laundry. When not planning a school day, writing a blog post or cooking pasta, Kate can be found curled up with a book or working with some kind of fiber craft. Kate blogs at DailyGraces.net.

Feature Image Credit: Andrey Niqi,  pexels.com/photo/cows-grazing-on-field-against-sky-254178/