Tend the Flock / Cuidar el Rebaño

In today’s first reading from Jeremiah we hear the Lord in agony over the shepherds he has called to tend to his flock. Jeremiah shares God’s words: “You have scattered my sheep and driven them away. You have not cared for them, but I will take care to punish your evil deeds.” 

It could be easy to look at this and think about the faults of priests and bishops over the centuries, but I read this and hear Jeremiah talking to me and to all of us. Vatican II was very clear that as lay people we are all called to preach the Good News, to engage the culture, to help bring people into the Church, and to show love to all we meet. Pope Paul VI stated: “As sharers in the role of Christ as priest, prophet, and king, the laity have their work cut out for them in the life and activity of the Church. Their activity is so necessary within the Church communities that without it the apostolate of the pastors is often unable to achieve its full effectiveness.” (Apostolicam Actuositatem, section 10)

Let’s reflect on that for a second. The pope said that if we do not evangelize and fulfill our offices of priest, prophet, king, then pastors cannot be truly effective. See how the words from Jeremiah start to apply to us today? I think there is an ideology that has crept into the Church that as long as we are nice and treat others well then people will somehow make the connection that we are Christian and we don’t need to explicitly evangelize.

Of course, this doesn’t work. Any number of people can be nice and caring without being  Christian. Christ makes it clear in the Gospels: “Go therefore and make disciples of all nations, baptizing them in the name of the Father and of the Son and of the Holy Spirit, and teaching them to obey everything that I have commanded you. And remember, I am with you always, to the end of the age.” (Matthew 28:19-20)

In order for us to respond to the call of Christ we have to ask for the courage to be explicit about our faith. Living a good life is not enough. Everyone has different strengths and spiritual gifts, so maybe you are not personally called to go into the streets and talk to people about Jesus or to give a public talk at a youth group, but there is something specific that God is calling you to do. Maybe it is talking with a coworker or someone at the gym who has questions or maybe even someone on staff at the parish who needs some help. 

Let’s pray today that we might realize how God is calling each of us to evangelize in our own way. Jesus has chosen us to be instruments of his love, peace, and mercy. Let’s answer the call and preach the Gospel to all those we meet. 

From all of us here at Diocesan, God bless!

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En la primera lectura de Jeremías de hoy escuchamos al Señor en agonía por los pastores que ha llamado para cuidar de su rebaño. Jeremías comparte las palabras de Dios: “Ustedes han rechazado y dispersado a mis ovejas y no las han cuidado. Yo me encargaré de castigar la maldad de las acciones de ustedes.”

Podría ser fácil mirar esto y pensar en las fallas de los sacerdotes y obispos a lo largo de los siglos, pero yo leo esto y escucho a Jeremías hablándome a mí y a todos nosotros. El Vaticano II fue muy claro en que, como laicos, todos estamos llamados a predicar la Buena Nueva, a involucrarnos con la cultura, a ayudar a atraer personas a la Iglesia y a mostrar amor a todos los que conocemos. El Papa Pablo VI declaró: “Los laicos tienen su papel activo en la vida y en la acción de la Iglesia, como partícipes que son del oficio de Cristo Sacerdote, profeta y rey. Su acción dentro de las comunidades de la Iglesia es tan necesaria que sin ella el mismo apostolado de los pastores muchas veces no puede conseguir plenamente su efecto.” (Apostolicam Actuositatem, artículo 10)

Reflexionemos sobre eso por un segundo. El Papa dijo que si no evangelizamos y cumplimos nuestros oficios de sacerdote, profeta y rey, los pastores no podrán ser verdaderamente eficaces. ¿Ves cómo las palabras de Jeremías comienzan a aplicarse a nosotros hoy en día? Creo que hay una ideología que se ha infiltrado en la Iglesia de que mientras seamos amables y tratemos bien a los demás, la gente de alguna manera establecerá la conexión de que somos cristianos y no hay necesidad de evangelizar explícitamente.

Por supuesto, esto no funciona. Cualquier cantidad de personas pueden ser amables y atentas sin ser cristianas. Cristo lo deja claro en los Evangelios: “Vayan, pues, y hagan discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado. Y recuerden, Yo estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.” (Mateo 28,19-20)

Para que podamos responder al llamado de Cristo tenemos que pedir el valor de ser explícitos acerca de nuestra fe. Vivir una buena vida no es suficiente. Cada uno tiene diferentes fortalezas y dones espirituales, así que tal vez no estés llamado personalmente a salir a las calles y hablar con la gente sobre Jesús o a dar un discurso público en un grupo de jóvenes, pero hay algo específico que Dios te está llamando a hacer. Tal vez sea hablar con un compañero de trabajo o alguien en el gimnasio que tiene preguntas o incluso alguien del personal de la parroquia que necesita ayuda.

Oremos hoy para que podamos darnos cuenta de cómo Dios nos está llamando a cada uno de nosotros a evangelizar personalmente. Jesús nos ha elegido para ser instrumentos de su amor, paz y misericordia. Respondamos al llamado y prediquemos el Evangelio a todos los que nos encontremos.

De parte de todos nosotros aquí en Diocesano, ¡Dios los bendiga!

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Tommy Shultz is a Business Development Representative for Diocesan. In this role he is committed to bringing the best software to dioceses and parishes while helping them evangelize on the digital continent. Tommy has worked in various diocese and parish roles since his graduation from Franciscan University with a Theology degree. He hopes to use his skills in evangelization, marketing, and communications, to serve the Church and bring the Good News to all. His favorite quote comes from St. John Paul II, who said, “A person is an entity of a sort to which the only proper and adequate way to relate is love.”

Feature Image Credit: Biegun Wschodni, unsplash.com/photos/man-standing-in-front-of-group-of-lamb-vD3L-rN_qNw